Existe una especie de araña que en lugar de succionar los licuados órganos de sus víctimas sopla hasta que el cadáver estalla en una suerte de deliciosa piñata visceral. Luego se dedica a lamer las paredes de su habitáculo, porque no construye telas sino unas curiosas construcciones a base de arcilla regurgitada.
¿Hay algo que no nos podría colar un documental de animales? Si David Attenborough rodase un mockumentary, absolutamente nadie sospecharía. ¿Que hay ballenas azules que violan tiburones? ¿Que los canguros son reversibles? ¿Monos-rata caníbales han logrado construir armas de fuego? Sí a todo, David. Shut up and take my money.
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