El ser humano presenta unas estrategias de flirteo muy retorcidas, hay unos subtextos sexuales en el día a día que a veces no son fáciles de captar, muchos tira y afloja, muchos tú a Londres y yo a California. Hitler por ejemplo, que mató a todos esos judíos para impresionar a Eva Braun, era ella la que era una nazi de aúpa; pero la historia lo ha tergiversado todo, pobre Adolf, él que todo lo hizo por amor, montó todo ese tinglado para llevársela al huertoffen. Ya no os parece tan malo, ¿verdad? Tenía un corazón que no le cabía en el pecho.
